Realizar una revisión pre ITV en Madrid es lo más habitual cuando quieres superar este trámite sin dificultades. En este control no sirve con presentarse, pagar y firmar unos documentos, sino que nuestro vehículo será inspeccionado a fondo para garantizar que es seguro tanto para nosotros como para el resto de personas que se vaya a encontrar en la la vía pública. En este post comentaremos los fallos más comunes que te harán tener que repetir tu visita a la ITV.

Los fallos en alumbrado y señalización representan cerca del 30 por ciento de faltas graves. Por eso, cuando realices una revisión pre ITV en Madrid, deberás estar atento a que tu vehículo tenga en perfecto estado las luces de carretera (las largas), las de freno, delanteras, y posición trasera, algunas de las luces de cruce, la luz antiniebla trasera, y parte de los intermitentes. Asimismo, otro fallo grave es que la matricula no esté correctamente iluminada.

Otro de los defectos que más se repiten y son más penalizados son las debilidades en ejes, ruedas, neumáticos y suspensión. Los neumáticos deben tener una profundidad del dibujo superior a 1,6 milímetros, estar bien montados, estar homologados, tener el mismo eje y no presentar bultos, deformaciones o grietas. Los frenos alcanzan casi el 10 por ciento de defectos graves. Se penalizarán si no existe una fuerza de frenado progresiva, si tardan en actuar o si el freno de mano no presenta la eficacia necesaria.

Una vez finalizada la inspección, nuestro vehículo puede tener que ser remolcado por una grúa hasta el taller si presenta demasiados defectos graves. Por eso, para ahorrarte problemas tan molestos como tener que quedarte sin transporte, te recomendamos que acudas a SERDISASL para realizar una revisión a tu coche y acudir al control con todo en orden, algo que, además, te evitará sanciones económicas.

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