Los inyectores de combustible son los encargados de optimizar el motor, para que rinda todo lo que se espera de él. Por ello si no optas por reparar los inyectores Common Rail cuando toque el coche no funcionará como debe, disminuyendo su potencia en trayecto.

El principal problema de una posible incidencia en un inyector es que, de no repararse, puede acabar afectando al filtro, al regulador del coche o a la bomba, ocasionando males peores. Por ello, es importante que sepas cómo detectar cuándo reparar los inyectores Common Rail: fíjate en el kilometraje del coche, pues si has recorrido más de 150.000 kilómetros es muy posible que simplemente por su uso estén fallando, y si los inyectores están fallando surgirán problemas para arrancar el vehículo y las revoluciones seguramente serán irregulares e inestables.

Otras señales, más secundarias, pero que también pueden hacer saltar todas las alarmas están en el consumo, pues también quedará perjudicado: se consume más haciendo la misma distancia de todos los días. Además, cuando los inyectores están fallando es común notar un ligero olor a gas en el vehículo, señal de que los componentes no están en el mejor estado.

En todos estos casos es imprescindible recurrir a un servicio profesional especializado en la revisión, reparación o reemplazo de inyectores, como el que damos en Reparación Inyección Diesel: revisamos y limpiamos tus inyectores para que vuelvas a disfrutar del mejor rendimiento del motor de tu coche. Ponte en contacto con nuestro departamento mecánico y confía en la profesionalidad de nuestros técnicos.

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